Indudablemente el gas natural es la opción en el corto, mediano y largo plazo, en el orden económico, así como en el orden medioambiental, el gas natural es la opción, para reducir la factura petrolera.
Esto nos ayudaría en varios órdenes, resultaría un mecanismo contra la inflación, reduce la presión en la cuenta corriente de nuestra nación y contribuye a la economía circular el cual hace referencia a la conservación de materiales y recursos el mayor tiempo posible, reduciendo la generación de residuos, aprovechando la proximidad de estos residuos generados en el ámbito local, disminuyendo el impacto en el transporte y como garantía para la seguridad del suministro.
Ante el evidente agotamiento de los combustibles convencionales, el gas natural permite a través de la descomposición anaeróbica de desechos orgánicos, residuos domésticos, industriales y comerciales, así como de aguas residuales, obtener biogás. Una vez limpio y metanizado, el biogás se transforma en biometano y queda listo para su uso, exento de emisiones de carbono.
En lo que al medioambiente se refiere las bondades del gas natural son varias entre ellas tenemos; mejora de la calidad del aire, reduce el efecto invernadero, favorece el uso de energías renovables.
En cuanto a los combustibles derivados del petróleo esta dependencia nos hace cada día más vulnerables económica y medioambientalmente, para que tengan una idea, GOLMAN SACHS (GS), que es el grupo banca de inversión y de valores más grande del mundo, predijo que los precios del petróleo en los meses de julio y septiembre del 2022 alcanzaran los ciento cuarenta dólares (USD$140.00) el barril del petróleo, eso va a provocar en república dominicana, más inflación, una mayor presión sobre nuestras balanza de pago y una importante reducción de nuestras reservas internacionales.
Definitivamente la promoción del gas natural en todos sus órdenes debe estar en la agenda inmediata del gobierno dominicano y del sector privado; que hagan las diligencias suficientes para desarrollar las infraestructuras necesarias para el suministro de gas natural tanto en el consumo industrial, domestico, vehicular y generación de energía eléctrica, para asegurar la estabilidad económica de la nación frente al problema que en este momento representa el petróleo.
Por Ysrael Abreu