RZ NOTICIAS, SANTO DOMINGO. – El ex Ministro de Defensa, Sigfrido Pared Pérez, reveló este miércoles que debido a la ubicación estratégica del país en el centro del Caribe, se ha convertido en un «puente» para el narcotráfico, fenómeno que ha afectado la seguridad y estabilidad regional.
Pared Pérez destacó que esta situación está vinculada a factores geográficos, sociales y económicos que convierten a República Dominicana en un punto clave en el tránsito de drogas, tanto hacia Estados Unidos como hacia Europa.
“El narcotráfico no busca islas pequeñas como Dominica, Martinica o Guadalupe. Busca países con una infraestructura más desarrollada y una ubicación estratégica, como República Dominicana, que en los últimos 30 años ha experimentado un notable desarrollo”, indicó.
Detalló que uno de los mayores desafíos de seguridad para el país es su extensa frontera terrestre con Haití, la nación más pobre del hemisferio occidental, con la que comparte una línea fronteriza de 390 kilómetros.
El miembro del Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), expresó sus consideraciones al ser entrevistado por los comunicadores Jaime Rincón, Aneudy Ramírez, Julio Samuel Sierra y Nilson Batista en el programa “El Nuevo Diario en la Tarde”, transmitido por la plataforma digital “El Nuevo Diario TV.
Según Pared Pérez, este contexto ha hecho que República Dominicana sea vulnerable al narcotráfico, ya que es un país de tránsito obligado para las rutas internacionales de drogas.
República Dominicana como un «puente» obligado
El ex almirante explicó que la posición geográfica del país, ubicada en el centro del Caribe, la convierte en un punto de tránsito obligatorio para las mercancías ilegales provenientes de América del Sur, especialmente de países productores de cocaína como Colombia, Venezuela y Perú.
“El narcotráfico ve en la República Dominicana como un destino natural para trasladar sus cargamentos hacia Estados Unidos y Europa. Nuestro país, en el centro del Caribe, ha sido históricamente un punto estratégico en las rutas de narcotráfico”, señaló.
El ex funcionario también destacó que, hasta 2019, la República Dominicana lideraba el Caribe en términos de volumen de mercancías en tránsito.
Indico que en ese periodo, el país movía más de tres contenedores al año, mucho más que toda la región insular del Caribe.
Además, señaló que la República Dominicana es uno de los países más conectados del Caribe, con más de 240 vuelos internacionales, lo que también representa un desafío en términos de seguridad, ya que facilita la circulación de personas y mercancías, incluidas aquellas involucradas en actividades ilícitas.
El riesgo de la migración irregular y el auge del turismo
Pared Pérez también hizo referencia a la creciente migración irregular, especialmente desde Haití, donde cerca del 70% de la población se encuentra indocumentada.
Según él, la falta de documentación y control migratorio contribuye a los riesgos de seguridad, ya que muchas personas pueden infiltrarse en el país sin ser detectadas.
Precisó que esto se agrava con el auge del turismo, que ha superado los 10 millones de visitantes anuales, algunos de los cuales intentan ocultar sus intenciones ilícitas.
“La República Dominicana ha logrado convertirse en un país mediano en términos económicos, compitiendo con naciones de mayor población y economía”, señaló Pared Pérez.
Sin embargo, señaló que este desarrollo ha traído consigo riesgos, no solo por la cantidad de turistas, sino también por aquellos que buscan evadir la justicia en sus respectivas naciones y se confunden entre los visitantes.
Un país en crecimiento, pero vulnerable
A pesar de estos retos, Pared Pérez enfatizó que la República Dominicana es un país que ha demostrado un crecimiento económico considerable y una creciente conectividad global, pero advirtió que, debido a su ubicación y situación, seguirá enfrentando grandes desafíos en términos de seguridad.
“República Dominicana está en el hemisferio occidental, muy cerca de los Estados Unidos y con una frontera marítima estratégica que la coloca en una posición privilegiada, pero también vulnerable, frente a las amenazas del narcotráfico”, subrayó.
Fuente: El Nuevo Diario