WASHINGTON.- El comentarista Charlie Kirk, un estrecho aliado del presidente de EE.UU., Donald Trump, fue asesinado este miércoles de un disparo durante un multitudinario evento en una universidad de Utah, causando una enorme conmoción entre las filas republicanas en un momento marcado por el aumento de la violencia política en el país.
El momento del disparo, que se produjo instantes después de que hablara sobre la violencia armada en EE.UU., fue captado desde varios ángulos por la multitud presente en el evento y difundido en redes sociales.
Tras conocerse su fallecimiento, el mandatario republicano ordenó ondear a media asta las banderas del país hasta el domingo por la tarde en honor a Kirk, «un verdadero gran patriota estadounidense».
Aunque el centro académico informó que un sospechoso había sido arrestado, el periódico The New York Times detalló luego que la persona detenida no es el autor del disparo.
Una portavoz de UVU, Ellen Treanor, indicó por su parte que el sospechoso disparó al activista conservador desde unos 180 metros, según detalló Fox News.
«Estamos en guerra»
Waras el asesinato de Charlie Kirk la ultraderecha de EE.UU. lamenta la muerte de una figura que describen como un luchador y alertan que el país «está en guerra» tras este suceso de supuesta violencia política.
«El movimiento que Charlie inició no se detendrá jamás (…) murió luchando no solo por él, sino también por ustedes, por Jesucristo y por esta nación”, afirmó Jack Posebic, comentarista político cercano a Kirk y colaborador en su organización Turning Point USA, en declaraciones a Real America’s Voice, la cadena donde Kirk conducía su programa ‘The Charlie Kirk’s Show’.
«¿Creían que antes las cosas estaban mal?, ¿que estábamos haciendo demasiado? Nos acaban de quitar a unos de nuestros amigos. Esto es lo que ustedes le han hecho a nuestro país. Lo que viene ahora, será culpa de ustedes», sentenció.
En el mismo programa, Steve Bannon, exasesor de Trump y estratega durante su primer mandato, fue un paso más allá y señaló que Kirk «es una víctima de la guerra política que se está librando» en EE.UU..
«Estamos en guerra (…) habrá oraciones, duelo y banderas a media asta, pero debemos mantener una determinación férrea», agregó.
Conmoción por su muerte entre aumento de la violencia política
Mientras continúa la búsqueda del tirador por parte del FBI, que se encuentra desplegado en la zona, las principales figuras políticas unieron fuerzas para lamentar el asesinato y condenar la violencia contra una de las figuras más influyentes del país.
Tanto su aliado Trump como el vicepresidente J.D Vance, pidieron orar por Kirk. «Dale, Señor, el descanso eterno», tuiteó el segundo al mando de EE.UU. una vez confirmado su fallecimiento.
«El ataque a Charlie Kirk es repugnante, vil y reprensible. En Estados Unidos, debemos rechazar la violencia política en todas sus formas», indicó el gobernador de California, el demócrata Gavin Newsom.
«Charlie era un amigo cercano y confidente. Muchos lo extrañarán profundamente. Todo líder político debe condenar esta violencia enérgica y rotundamente. Nuestras oraciones están con su esposa y sus hijos pequeños. Que descanse en paz», escribió por su parte el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson.
Si bien por el momento se desconoce el motivo del tiroteo, el asesinato de Kirk ocurre en un momento en el que la violencia política ha ido en aumento en EE.UU. en el último año.
El presidente estadounidense fue víctima de al menos dos atentados fallidos el año pasado durante su campaña electoral para poder retornar a la Casa Blanca. El más impactante fue el de julio de 2024 en el que resultó herido de un disparo en la oreja durante un mitin en Butler (Pensilvania).
A su vez, el pasado junio, la congresista estatal demócrata de Minesota Melissa Hortman y su esposo fueron asesinados a tiros en su casa en lo que las autoridades tildaron de un «un asesinato por motivos políticos».
En ese mismo incidente, el senador demócrata John Hoffman y su mujer, también de Minesota, resultaron heridos de múltiples disparos en otro ataque cometido por la misma persona.
Nacido en octubre de 1993 en Illinois, Kirk, que estaba casado y era padre de dos hijos, era un activista, escritor y comentarista conocido principalmente por haber fundado Turning Point, una organización estudiantil que promueve los valores conservadores.
El comentarista, que residía en el estado de Arizona, en el suroeste de EE.UU., solía participar en debates universitarios en los que confrontaba sus ideas con las de estudiantes progresistas.
Kirk prestó además su apoyo a Trump en varios de sus mitines de campaña electoral del año pasado y estuvo presente en la ceremonia de investidura del hoy presidente.
Su evento en Utah formaba parte de su primera parada por una gira planificada por varias universidades del país para movilizar a la juventud. EFE